El campo de fútbol de Capdepera, dentro del complejo deportivo de es Figueral, ha sufrido un nuevo acto de vandalismo. Una de las barreras que cierran el campo ha aparecido rota y desplazada de su sitio. La instalación está cerrada con unas barreras para evitar el acceso a las personas en horarios en los que no hay entrenamiento. Esta medida se tomó para evitar otros problemas que eran frecuentes, como redes rotas o estiércol desperdigado sobre el mismo césped.