El ayuntamiento de Andratx gestionará la Finca de Can Fasser durante los próximos treinta años.

Así se desprende del acuerdo que han cerrado esta semana la institución local y el ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente del gobierno central, una vez que el Consistorio ha aceptado las condiciones de la concesión, que son "muy ventajosas para ambas partes".

Ayuntamiento y Gobierno ya alcanzaron un principio de acuerdo en abril de 2016, después de años de insistencia por parte del consistorio 'andritxol' por conseguir la gestión de la finca debido a su proceso de degradación y porque no se cumplía nada de lo pactado tras su venta al gobierno en el año 2000.

Ahora, y tras una visita de la directora general de Costas a la propia finca para entender de primera mano la necesidad de una gestión más cercana y los acuerdos alcanzados por ambas partes, será el Ayuntamiento quien determine el futuro de la finca ubicada en el puerto 'andritxol'.

De este modo, podrá desarrollarse el proyecto de rehabilitación que permitirá adaptar la finca a la morfología actual del litoral del puerto, así como su recuperación paisajística y la rehabilitación de una zona húmeda de relevante valor ecológico.

El objetivo municipal es el de abrir la finca a la ciudadanía y acoger en la misma el centro de interpretación del parque natural de sa Dragonera, así como otras exposiciones itinerantes de temática medioambiental.

En este sentido, a finales del año pasado Jaume Porsell, entonces alcalde de Andratx, y Sandra

Espeja, consellera insular de Medio Ambiente, firmaron un protocolo general de intenciones para,

una vez conseguida la concesión de la finca de Can Fasser, ubicar allí el centro de interpretación de sa Dragonera.

Impuesto turístico

Para ello, Katia Rouarch, alcaldesa de Andratx, afirma que será necesaria la implicación del Govern a través del impuesto de turismo sostenible, puesto que "la recuperación de esta zona deteriorada de gran valor medioambiental cumple con todos los requisitos del impuesto: es muy positiva desde un punto de vista medioambiental y también turístico, además de potenciar la conservación de los espacios naturales".

La alcaldesa destacó la importancia que supone para el municipio poder recuperar la finca de Can Fasser, afrontar su rehabilitación, y hacer de la misma "un espacio donde además del centro de interpretación se puedan llevar a cabo otras acciones, respetando toda la fauna y flora autóctona al tratarse de una zona húmeda que tiene un importante valor ecológico".