El Ayuntamiento ha cerrado al tráfico el final de la calle Creu en dirección al torrente debido a obras de sustitución de la conducción de agua potable. Esta tubería presta servicio a unos 50 usuarios de la zona rústica. La antigua tenía muchas pérdidas y el consistorio ha aprovechado la convocatoria de subvenciones del Consell para llevar a cabo esta mejora de unos 180.000 euros.