El patio del emblemático edificio del Centro Social de Artà, situado en la calle Rafel Blanes, una construcción neoclásica levantada en 1864 y propiedad de la parroquia, albergará nueve plazas de aparcamiento para coches, a las que se accederá desde la calle Sol.

Según explicó a este periódico el párroco, Joan Servera, se han iniciado unas obras para adecuar el recinto, concretamente el patio interior situado en la parte posterior del inmueble. Se trata de obras de poca envergadura y que no impedirían que en el futuro se pueda volver a su estado original si se estima oportuno.

Según Servera, las obras que ya se han iniciado, está previsto que concluyan a finales de este mes para luego alquilarlas. Algunos vecinos ya han mostrado interés, ya que en su emplazamiento, en el casco histórico, se hace difícil encontrar zona de estacionamiento. Además, las ultimas reformas realizadas en calles adyacentes han provocado la reducción de aparcamientos en la vía publica, lo que acrecienta el problema para los vecinos de la zona.

El Centro Social acoge actualmente la delegación de Cáritas, la revista local Bellpuig y también una pequeña capilla, donde se celebra misa para la gente que no puede subir a la iglesia. A lo largo de los años ha sufrido diferentes reformas, para adaptarse a los usos que ha tenido. De hecho, ha tenido jardines, que ya han desaparecido, mientras que se ha ganado en altura, actualmente consta de tres plantas. El edificio albergó en torno a 1930-1940 la sede del consistorio municipal, cuando éste estaba de reforma. También aquí empezaron a hacer sus primeras canastas los jugadores del club de básquet de Artà e incluso ha servido de patio de colegio.