El principal grupo de la oposición en el ayuntamiento de Santa Margalida, Suma pel Canvi, ha reclamado hoy al equipo de gobierno presidido por el alcalde Joan Monjo que reclame la facturación irregular a la concesionaria de la playa de Son Bauló, después de haber reconocido el Ayuntamiento que se aplicaban cobros ilegales no contemplados en el cuadro de tarifas pactado entre la empresa y la institución municipal.

La coalición progresista quiere saber la cantidad que "se ha obtenido de forma irregular" y que posteriormente se destine este dinero, cuya cuantía se desconoce, a una "finalidad pública" todavía por decidir. Esta inversión solicitada por la oposición se ejecutaría después de haber descontado las posibles reclamaciones efectuadas por los clientes afectados.

La coalición progresista se "felicita" por la actuación municipal, aunque precisa que la sanción anunciada de 450 euros "no es nada disuasoria para evitar estas prácticas".La formación liderada por el exalcalde Antoni Reus también cree que la posibilidad de que los clientes reclamen el dinero cobrado de más "no tendrá efectos prácticos". "Es evidente que la mayoría de afectados serán turistas, y además es improbable que para reclamar 50 céntimos los ciudadanos se tomen la molestia de ir hasta las oficinas municipales".