El pleno municipal de sa Pobla aprobó ayer una propuesta instada por Més que propugna que la central de es Murterar indemnice al municipio por sus emisiones a la atmósfera.

El grupo municipal Més per sa Pobla elevó anoche la propuesta a la consideración del pleno en la que, además, pide el cierre de la central de es Murterar y que se indemnice el municipio pobler con motivo de las emisiones contaminantes que llegan a sa Pobla y "por las que sólo el municipio alcudienc es indemnizado", sostiene la proposición.

"Los efectos ecológicos debido a la contaminación -que cada vez se hacen más patentes debido a la antigüedad de la fábrica- no entienden de fronteras, por lo que afecta tanto al municipio de sa Pobla como el de Alcúdia", sostiene el portavoz Antoni Simó.

"No hace falta decir que el objetivo tiene que ser el cierre de la fábrica. La obsolescencia de la central provoca efectos irreversibles a nuestro entorno. Necesitamos dejar la combustión de carbón drásticamente para reducir las emisiones de anhídrido carbónico y no aumentar las temperaturas de nuestro planeta", defendió el portavoz de Més por sa Pobla, Antoni Simó.

El grupo municipal pidió más energías renovables y explorar un posible suministro a partir de la microgeneración energética, "menos dependencia de las grandes empresas suministradoras y más soberanía y solidaridad", defendió Simó.

La propuesta contó también con el apoyo de los Independientes-El Pi. Biel Ferragut, alcalde, explicó que "es inevitable que se deban ir cerrando las centrales como la de es Murterar. Es cara y además contaminante. No tenemos reparo en apoyar la propuesta".

Es Murterar es una central térmica, situada dentro del término municipal de Alcúdia, pero próxima a sa Pobla. Consta de cuatro grupos de vapor que queman hulla, y de dos grupos de turbina de gas que utilizan gasóleo como combustible. El primer grupo de carbón, de 125 MW de potencia, entró en funcionamiento en 1981. El segundo grupo, también de 125 MW de potencia, se conectó a la red en 1984.