Evitar colapsos y saturaciones, garantizar que los residentes puedan llegar a sus domicilios y que haya seguridad en caso de accidente (paso sin problemas de ambulancia y bomberos, etc.). Estos son los objetivos de la iniciativa activada hoy, lunes, en s'Almonia (municipio de Santanyí). El Ayuntamiento ha procedido a la regulación de la circulación y el aparcamiento en la zona con la colocación de una treintena de señales.

Maria Pons (PP), regidora de Policía Local, ha detallado a este diario que, en cuanto a discos de prohibido circular excepto residentes, se han instalado ocho, en las cuatro entradas a s'Almonia (núcleo al que los conductores han de entrar si quieren llegar también al Caló des Moro). Agentes policiales controlan e informan del nuevo carácter restringido, "y la valoración es buena, falta un rodaje, comprobar la eficacia real de la medida, pero en este inicio no se están registrando incidentes".

En los últimos años, s'Almonia y Caló des Moro han padecido diversas jornadas de saturación y caos, con espectaculares avalanchas de bañistas y turistas, enfado de residentes afectados y riesgos en caso de emergencias.

De esta forma, clausurando los accesos de s'Almonia (siendo autorizados exclusivamente los residentes) el consistorio cumple su compromiso con los vecinos empadronados y remarca el objetivo de garantizar la seguridad general.

El próximo día 10 de este mes, la institución municipal dirigida por el alcalde Llorenç Galmés tiene prevista una reunión con el director general de Transports del Govern y el gerente del Consorci de Transports para abordar la pronta puesta en funcionamento de un bus lanzadera precisamente hasta s'Almonia y el Parc de Mondragó, entre otros puntos de la costa. El consistorio dice haber ya preparado un aparcamiento con capacidad para 170 coches en el área del supermercado Lidl del polígono de s'Olivó (entrada a Santanyí desde Campos).