? El edificio de s'Espigol Beach cuenta con dos escaleras; es decir se divide en dos comunidades. Muchos vecinos que adquirieron 'viviendas' sólo disfrutaron de ellas un cierto tiempo pues los antiguos propietarios suministraban energía con un contador de obras. Alguna de las vecinas sostiene que "pagábamos 100 euros al mes de comunidad, con lo que suponemos que pagaban la electricidad y nos mantenían engañados diciendo que se iba a reconvertir el edificio en viviendas de forma oficial". Desde hace unos años ya no tienen energía eléctrica ni agua porque nunca se pudo conseguir la célula de habitabilidad. El edificio está padeciendo una continua degradación, se han producido robos de cableado en algunas viviendas. Y lo más preocupantes es que muchos propietarios, inicialmente estafados, efectuaron presuntamente reventas para dehacerse del problema con lo que en la actualidad es incluso difícil definir quines son los actuales propietarios. Algunos estarían dispuestos a invertir para que el edificio no se degrade y se integre en el barrio pero mientras se encuentren en la incertidumbre actual les es "muy difícil pues no queremos perder lo que tenemos pero tampoco afegir al banyat", exclama una afectada. Muchos de ellos son gente humilde, trabajadores y jubilados que creyeron haber encontrado una bonita oferta para adquirir un pequeño apartamento en segunda línea de Can Picafort, pero se han encontrado con un mar de problemas y con la amenaza de la piqueta después de haber desembolsado sus ahorros o endeudarse.