El primer pleno de rendición de cuentas de la historia de Calvià se saldó ayer con un balance que rayó el triunfalismo por parte de la mayoría gobernante, mientras que se tiñó de tonos más grises cuando habló la oposición. Entre esas filas opositoras, no estuvo el segundo partido del municipio, el PP, que se ausentó en señal de protesta por la elección de Es Generador como sede, postura que generó las críticas de las otras formaciones. Tampoco asistió el edil del Grupo Mixto Ignacio González de la Madrid.

Más de 80 personas casi llenaron el auditorio de Es Generador, donde hubo una gran presencia de cargos municipales y militantes conocidos de los partidos con representación municipal. La sesión constó de dos partes. La primera fue la que más se pareció a un pleno ordinario de los que se celebran cada mes en Calvià vila. Empezó interviniendo el alcalde Alfonso Rodríguez Badal (PSOE), quien hizo balance de su mandato y destacó que la "mejora" que ha experimentado Calvià es "evidente". Así, habló de la actualización del proyecto turístico del término, de la reducción del paro en meses invernales, de la reconversión de Magaluf y del incremento de becas y partidas para mejoras en infraestructuras.

Luego, tomaron la palabra los portavoces de los diferentes grupos políticos municipales. Desde Esquerra Oberta, Rafel Sedano, reconoció que el municipio "ha mejorado", pero apostilló: "Sólo faltaría, después de 12 años de oscuridad del PP". Sedano pidió, sin embargo, "más valentía y liderazgo" al alcalde.

Por su parte, el regidor de Ciudadanos, Carlos Tarancón, fue el más crítico con el formato del pleno de rendición de cuentas, y achacó al gobierno municipal que no lo hubiese consultado con el resto de grupos. Tarancón lamentó el aumento de gasto público de estos años y el "atasco" en urbanismo, entre otras cuestiones.

También empleó un tono crítico la edil no adscrita, Isabel Manresa, quien censuró que no se le deje participar en la Junta de Portavoces. Justificó también su voto contrario a los presupuestos, ya que, en su opinión, incumplían requisitos sociales como la gratuidad de los comedores escolares.

La segunda parte de la sesión fue la más diferente a los plenos ordinarios. Llegados a este punto, cualquiera de los asistentes pudo hacer una pregunta a los regidores, ya fuera en voz alta o bien tramitándola por escrito. Los vecinos preguntaron, por ejemplo, sobre la mala conexión de transporte en Cala Fornells, sobre la inseguridad en Punta Ballena y sobre la competencia que supone el todo incluido para la oferta complementaria del municipio.