El pasado 1 de marzo, el ayuntamiento de Son Servera inició las obras de reforma de la céntrica Avinguda Joan Servera que da acceso a Cala Millor. A éstas les precedieron las de la calle Son Corb, por lo que esta zona turística lleva más de un mes en obras. Los trabajos están levantando quejas vecinales y del partido en la oposición On Son Servera, que advierte que se prolongarán hasta el próximo 1 de mayo y que afectarán no solo a los locales ya abiertos en la zona, sino también a los miles de turistas que han reservado en hoteles de la zona esta próxima Semana Santa.

El portavoz de On Son Servera, Antoni Cànovas, manifiesta que desde su formación no solo están contrariados con las fechas de las obras, sino también con que se adoquinen las calles ya que por ellas tiene que circular el grosor de tráfico de la zona.

El adoquinamiento, asegura Cànovas, como ya se ha comprobado en otras calles del núcleo turístico, si soporta tránsito rodado, conlleva suciedad provocada por el roces de los neumáticos, grasas de los vehículos, etc, además de un incremento de la contaminación acústica.

En esta línea, según ON, los 550.000 euros que se gastará el Ayuntamiento (dirigido por el pacto integrado por PSOE e Independents) en estas obras, se podrían haber reducido si en la reforma se hubiera suprimido los adoquines y optado por el asfaltado con aceras, además de reducir el plazo de las obras en cuestión y las consecuentes molestias a los vecinos.