La rua se cobró ayer su parte del león pues fue la protagonista en la mayoría de municipios de la Part Forana, aunque otros esperan para celebrarla hoy.

Sea como fuere, ayer los habitante de los pueblos de Mallorca se pusieron la careta de la fiesta y se lanzaron a la calle a impregnarse del ´exceso´ del carnaval.

La propia palabra carnaval, proviene, según la tradición popular, del sustantivo carne. Probablemente evocando que tras él llega la cuaresma y sus restricciones al consumo de proteínas animales.

Ayer el carnaval se adueñó de la crítica en algunos municipios como Esporles que irónicamente reclamaba menos cultura, más descanso, aunque de forma muy sutil y metafórica.

Curioso fue este año Manacor, donde a petición de su Ayuntamiento los vecinos emularon al Far West en una rua temática.

Sin embargo, es destacable que la nota dominante en todas las rues y bailes de la Part Forana fueron las comparsas y carrozas con los temas festivos tradicionales: indios y vaqueros, payasos, bailarinas, cuentos, la fauna etc.

El carnaval es una celebración que tiene lugar inmediatamente antes del comienzo de la cuaresma cristiana, que se inicia a su vez con el Miércoles de Ceniza, que tiene fecha variable (entre febrero y marzo según el año). El carnaval combina algunos elementos como disfraces, desfiles, y fiestas en la calle. Por extensión se llaman así algunas fiestas similares en cualquier época del año. A pesar de las grandes diferencias que su celebración presenta en el mundo, su característica común es la de ser un período de permisividad y cierto descontrol. Todo ello acabará el martes con el entierro de la sardina.