Un homenaje a todas aquellas personas que han ayudado a la evolución y modernización de la escuela en Sant Llorenç. Sobre todo a los maestros que, muchas veces en situaciones complicadas y en espacios no precisamente muy aptos para la docencia, arrancaron con ilusión cursos y proyectos, hasta llegar a lo que es hoy en día el sistema educativo llorencí, compuesto por los colegios Mestre Guillem Galmés, el CEIP Son Carrió y el CEIP Punta de n'Amer de Sa Coma. Una historia de más de cien años que queda reflejada en el libro L'Escola a Sant Llorenç des Cardassar (1892-2015), dos años de trabajo, estudio, recopilación y redacción de datos, realizado por un grupo de doce personas y editado por el propio consistorio.
Una historia que abarca desde la independencia del municipio de Manacor, hasta el pasado año. Un libro que se compone de distintas partes y que referencia de forma detallada todos los edificios y maestros que han pasado por los diferentes colegios, públicos y privados que Sant Llorenç ha tenido de forma reglada. Desde las rurales de Sa Begura-Ses Planes o Son Berga (en uso hasta 1976), hasta la Escola Nova (construida en 1921 como colegio parroquial con dinero de los vecinos) o el CEIP Guillem Galmés, edificado tardíamente en 1961 y que aúna hoy en día a los alumnos del pueblo. Pasando por los espacios religiosos de las monjas de la Caridad en Sant Llorenç y de las Franciscanas de Son Carrió, donde las niñas aprendían costura.
Un estudio que no se olvida tampoco ni de la educación para adultos, ni del famoso Club Card y los campamentos juveniles. O de los docentes que más años y más influido en el devenir educativo del municipio. Nombres como doña Bàrbara Ferrer, Jaume Mayol o el propio Guillem Galmés, quien curiosamente, pese a dar nombre al actual colegio apenas impartió clase dos años entre el pueblo y Son Carrió.
Depuraciones
Algunos también depurados en tiempos del franquismo, como el curioso caso de María del Carmen Amparo de la Monja López, quien pese a su nombre algo pío fue expulsada tras un informe por ser "una señorita del avanzado siglo XX que le gustan los placeres, mujer de mucha libertad, vistiendo pijama, fumando pitillos ingleses y sintiendo satisfacción por lucir sus bien marcadas líneas en traje de baño..".
