Las lluvias intensas suelen poner al descubierto los defectos de construcción en los edificios. El centro de día de Santa Margalida no ha resistido la gran cantidad de agua que ha caído estos días y presenta "numerosos problemas de humedad", según explicó ayer el alcalde Joan Monjo, que expresó su preocupación por el estado del equipamiento público.

El inmueble ubicado en la Vila necesita una solución de urgencia para acabar con las filtraciones de agua que afectan a diferentes puntos del edificio. "El agua entra por el tejado, por los laterales y por debajo", explicó Monjo.

"Tenemos que pensar qué hacemos con esto, es una obra que se realizó hace unos quince años", añadió el alcalde, por lo que las responsabilidades no están tan claras como en el tema del muro cercano al instituto de la Vila.

El Consistorio también ha informado de desperfectos en las carpas municipales que se habían instalado con motivo del mercadillo navideño y en la sala de máquinas de la nueva piscina municipal, que se inundó debido a las lluvias.