El alcalde de Binissalem, Andreu Villalonga, ha remitido una carta a Movilidad reclamando el mantenimiento de la línea que comunica Binissalem con Palma y con Inca, "por tratarse de un servicio público necesario, puesto que afectará a los 4.000 usuarios que la utilizan cada año como medio de transporte habitual, según datos de Movilidad", indica el primer edil.

La carta no ha recibido respuesta y ha comunicado por escrito la supresión de las paradas de esta línea (L330) existentes en Binissalem.

Desde el ayuntamiento de Binissalem se manifiesta que "la red de autobuses públicos no se puede medir en términos de déficit y beneficio porque se trata de un elemento de cohesión social y territorial, por el que solicitamos que el Govern asuma el déficit".