Andreu Villalonga (PP) fue elegido ayer alcalde de Binissalem con seis votos favorables, cuatro de su partido y dos de UxB, de trece posibles. Fue proclamado como candidato de la lista más votada al faltar el voto de Esperanza Argüelles, que debe sustituir al dimitido Jeroni Salom.
Para que villalonga fuera investido fue preciso que Magdalena Moyá y Paula Moyá renunciaran a ser elegidas ya que el nuevo responsable municipal fue el quinto de la lista del PP en mayo de 2015.
El pleno comenzó con polémica porque los dos grupos de la oposición acusaron de falta de espíritu democrático al nuevo alcalde por convocar el pleno a las doce, en lugar de hacerlo en horario vespertino.
Pere Daniel Pol, portavoz de Més, destacó, además del horario, que "el candidato por el PP es el quinto de la lista lo que supone una falta de respeto al electorado pues si la intención es que fuera alcalde bien podrían haber tenido la decencia de ponerlo como número dos". Pol destacó que el acuerdo entre PP y UxB supone "continuidad y muy pocos cambios" y atacó diciendo que el proyecto del PP "es el proyecto de Bárcenas y de los sobres". El público, mayoritariamente favorable a los conservadores, protestó por lo que el ponente tuvo que detenerse unos instantes en su plática.
Responsabilidad
El portavoz ecosoberanista presentó su candidatura anunciando que era un "ejercicio de responsabilidad liderar una alternativa". Recordó que en las negociaciones "para formar un gobierno alternativo Més fue generoso y rebajó sus objetivos para llegar a un acuerdo".
Pepa Ramis, la candidata del PSOE, también presentó su candidatura, además de criticar el horario. Excusó la ausencia del segundo edil socialista precisamente porque no "ha podido dejar su trabajo".
Ramis argumentó que su partido siempre ha defendido un cambio de gobierno hacia la izquierda. Recordó que hizo público en varias ocasiones que siempre colaboraría en ese proyecto y que dejaba a iniciativa de la lista más votada de la izquierda (Més).
La portavoz socialista atacó directamente el pacto entre UxB y PP asegurando que "es una partida que ha ganado Víctor Martí (portavoz de UxB). Hoy se ha sellado un pacto contrahecho de centroderecha y a escondidas, con deshonestidad de UxB". La concejal del PSOE calificó el pacto como "una subasta al mejor postor" por parte de Martí, a quien acusó de promotor de "políticas que no son las más necesarias para los binissalemers".
Villalonga contestó a las acusaciones manifestando que "se ha convocado un pleno a mediodía y se alude a que es una mala hora, pero no lo fue para algunos representantes de este consistorio para asistir como público a la moción de censura de Selva". El nuevo alcalde dijo: "Sobre que éste sea un pacto a escondidas he de decir que no era yo quien se reunía en secreto en Inca para decidir el futuro de Binissalem".
Subasta
Y acerca de la calificación de "subasta", manifestó que "no fue el PP quien hizo sonar la campana. Nosotros gobernábamos en minoría y ofrecíamos acuerdos puntuales que algún grupo de la oposición ha apoyado durante este último año y medio".
Pol sostuvo que la referencia a las reuniones de la oposición fue "poco elegante, pues nos reuníamos en Inca porque es donde tenemos nuestra sede, ya nos gustaría tenerla en Binissalem".
