La ejecución de obras públicas que precisan de excavaciones suelen ser un buen sistema para sacar a la luz retazos de historia que permanecían olvidados bajo tierra. Ocurrió hace unos días en Inca, donde se hallaron dos pozos llenos de cerámica antigua, y ahora se ha sabido que un hecho similar ha sucedido en Alcúdia, donde los arqueólogos ya están estudiando los restos humanos que han aparecido durante las obras de peatonalización de la calle de Sant Francesc, ubicada en el centro histórico de la ciudad amurallada.

El hallazgo se produjo hace varios días cuando los obreros estaban realizando excavaciones en la citada calle céntrica, correspondientes a un proyecto de peatonalización de la citada vía y otras dos calles del casco histórico, La Pau y Dels Valents. Fuentes municipales explicaron que la excavacación ha llegado a unos dos metros y medio de profundidad, cota en la que han aparecido los restos humanos.

Añadieron que los restos humanos y de otras estructuras todavía están pendientes de catas arqueológicas para definir su antigüedad con la ayuda del carbono 14 y también su valor histórico. En función de los resultados del análisis arqueológico, el ayuntamiento de Alcúdia decidirá si mantiene a la vista los hallazgos o bien descarta su exhibición.

Posible convento

El regidor encargado de las obras públicas municipales, Joan Gaspar Vallori (PSOE), explicó que, según las primeras estimaciones todavía no confirmadas, los restos humanos corresponderían a adultos y niños que podrían haber sido enterrados en la cripta de un antiguo convento de la orden mendicante que estaba establecido en este punto del casco histórico de Alcúdia, en el interior de las murallas. En cualquier caso, Vallori precisó que "de momento todo son hipótesis" y que se está a la espera de más catas arqueológicas para conocer nuevos datos históricos. Los arqueólogos responsables del departamento de Patrimonio del Consell de Mallorca ya han visitado la excavación para recopilar los datos necesarios para la investigación.

Otra posibilidad que apuntan desde la dirección de la obra se refiere al posible enterramiento de gente sin recursos en una fosa común ubicada en el propio convento religioso cuyos vestigios habrían salido ahora a la luz.

El hallazgo de estos restos históricos ha obligado al ayuntamiento de Alcúdia a paralizar provisionalmente las obras en la calle de Sant Francesc, concentrando los esfuerzos en las otras dos vías del casco antiguo que también forman parte del proyecto.