Bernat Fiol, portavoz de la entidad ecologista Gadma, manifiesta ante la exposición pública de la nueva conexión viaria que "nos encontramos ante una nueva actuación ante hechos consumados. Se ha hecho una mala planificación histórica de los polígonos y después hemos de consumir más territorio y destrozar fincas rústicas para conectarlos con las vías de comunicación. Esa es la triste realidad".
Fiol sostiene: "No quiero ofender a consellers ni santamariers pues si una infraestructura es necesaria se ha de construir, pero es lamentable que se deba hacer destruyendo territorio porque las cosas ni se han pensado correctamente ni se han planificado a largo tiempo". Los dirigentes de Gadma preven reunirse en breve con los del GOB para plantear la posibilidad de realizar alegaciones al proyecto "con la intención de que consuma el menor territorio posible", sostiene Fiol.
El portavoz de Gadma se lamenta de que "todo esto es consecuencia de una política expansionista de los años 90 en la que construir polígonos era un negocio redondo. A mí me gustaría ver cuantos solares y naves están vacíos actualmente en Consell, Santa Maria, Binissalem e Inca".