La pista de skate de la localidad de Mancor de la Vall ha sido escenario de varios incidentes entre niños y patinadores mayores de edad en los últimos meses que han motivado la edición de un bando provisional por parte del alcalde mediante el que se prohíbe la entrada a la instalación a los mayores de 18 años.

Según explica la institución municipal en su perfil de Facebook, esta limitación tiene el objetivo de evitar que se produzcan riesgos de accidentes graves para los niños, que "tienen derecho a jugar", y otras "situaciones lamentables que han acabado con intentos de agresión y la intervención de la Guardia Civil hasta en dos ocasiones en los últimos meses".

Por este motivo, el equipo de gobierno ha decidido redactar un bando para definir las normas de uso del skatepark que estará vigente mientras se elabora un reglamento específico que permita la convivencia de todos los usuarios de esta instalación deportiva.

El bando explica que los últimos incidentes "no han hecho posible la normal convivencia" de los usuarios, principalmente la de los menores de edad.

La principal medida contemplada en el bando es la prohibición de acceso a los mayores de 18 años. El escrito establece una serie de derechos y de obligaciones que deberán respetar los usuarios para acceder a las instalaciones.

Entre las prohibiciones generales, figura la de fumar en el interior de las instalaciones, introducir objetos o envases de vidrio o el acceso de animales a excepción de los perros guía para los invidentes. También está prohibido usar el skatepark para practicar otros deportes diferentes a los permitidos en la pista.

Por otra parte, el bando firmado por el alcalde el pasado 11 de octubre prohíbe totalmente el consumo de alimentos que puedan generar residuos en el terreno de juego, básicamente frutos secos como pipas o cacahuetes. También está prohibido el consumo de bebidas alcohólicas y la incorporación de módulos como rampas, mesas o barandillas que puedan provocar daños en el skatepark o comprometer la seguridad de los usuarios.

Por último, el bando también veta la utilización del skatepark para impartir clases con la finalidad de obtener un beneficio particular, así como sentarse en las rampas.

El documento precisa que el incumplimiento de las normas generales podría suponer la expulsión de la instalación de los responsables de las faltas.