Los antiguos qanats árabes de Inca se encuentran en un estado de grave degradación. Se trata de un elemento etnológico y arquitectónico de un valor incalculable cuya pérdida sería irreparable.
La puerta de entrada no cuenta con ningún obstáculo que impida el acceso y ello ha conllevado a una serie de desmanes importantes en su interior. Las pareces de la estrecha escalera -excavada en 1850 para acceder a la construcción hídrica medieval- se encuentran llenas de pintadas y los escalones están muy desgastados.
El interior de la cámara, donde afloraba el agua antaño de la fuente que allí se encuentra está lleno de basura e incluso un somier, signo inequívoco de haber sido usado por algún indigente, además de contar con más pintadas.
Además de ello, el hecho de que permanezca abierto supone un peligro pues el acceso a los túneles que llegaban hasta la actual calle Formentor, y por donde desaguaba la fuente, son accesibles, estrechos y oscuros. Según Gabriel Pieras, cronista oficial de la ciudad, ha referido en varias ocasiones "es preciso conocerlos bien para acceder a su interior pues en muchos de ellos hay hoyos que podrían provocar accidentes".
Antecedentes
En 2010, el Ayuntamiento se propuso restaurarlos y por ello obtuvo una subvención de 50.000 euros del Govern que presidía Francesc Antich. Rafel Torres, a la sazón alcalde de Inca, explica que "la verdad es que fue el PSM quien se movió para conseguir que se llevara a cabo. No obstante he de reconocer que la subvención prometida nunca llegó".
Desde entonces la zona ha continuado degradándose. Virgilio Moreno, actual alcalde de Inca, manifestó ayer que "se ha previsto una actuación inmediata consistente en un cerramiento provisional para evitar precisamente el peligro del lugar".
Estado actual de degradación de las paredes de acceso al interior de los ´qanats´.
Por otra parte el Ayuntamiento ha redactado un proyecto de restauración que presentará en breve para que se estudie su inclusión en las obras susceptibles de ser financiadas con fondos de la ecotasa.
El consistorio considera que se adapta perfectamente pues se trata de un elemento patrimonial que además tiene muchísimo que ver con el agua.
