El TSJB ha confirmado la sentencia que impide la construcción de un campo de golf en el paraje de Son Bosc, próximo al parque natural de s'Albufera.

El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo Número 2 de Palma sentenció, el pasado 18 de febrero , a favor del recurso interpuesto en 2008 por el GOB y el PSM contra la licencia otorgada por el ayuntamiento de Muro para construir un campo de golf en Son Bosc. Ante la sentencia, contraria a sus intereses, ayuntamiento y Golfo Playa de Muro S.A. (promotora de la instalación deportiva) presentaron un recurso de apelación.

Ahora, mediante una nueva sentencia del pasado 11 de octubre, la Sala de lo contencioso-administrativo del TSJB se desestima el recurso de ayuntamiento y promotores, confirma nuevamente la ilegalidad de la licencia e impone las costas del procedimiento a los apelantes.

La normativa

La sentencia confirma que el ayuntamiento no podía otorgar la licencia para el campo de golf puesto que la legalidad vigente en el momento no lo permitía (la zona había sido protegida previamente por las Directrices de Ordenación Territorial). El Juez indica que a pesar de que para la obtención del Interés General sí se aplicó una normativa anterior, pera la obtención de la licencia era de aplicación lo dispuesto en las DOT por ser "dos procedimientos distintos". En este sentido el magistrado explica que no siempre es precisa una licencia de obras para llevar a cabo una actuación en una zona declarada de Interés General por lo que queda claro, en su opinión, que son procedimientos independientes y que, en el caso de la licencia de obras de Son Bosch, debería haberse denegado pues ya había entrado en vigos la nueva normativa.

A pesar de que ahora ayuntamiento y promotores pueden presentar recurso de casació, "en nuestra opinión será muy difícil que pueda prosperar", manifiesta Antoni Muñoz, portavoz del GOB.

Perjuicios

La sentencia implica perjuicios económicos para las arcas municipales pues se deberán retornar 400.000 euros recaudados por la concesión de las licencias. A esto se debe añadir que se han pagado a la empresa Fornells 12.000 euros de un primer informe jurídico para acudir al juzgado, más el informe de apelación de 21.000 euros y las costas del juicio que suponen unos 1.000 euros.

Miquel A. Tortell, concejal de Més sostiene que "es un coste muy elevado por querer hacer un campo de golf ilegal cuando desde el principio existía un informe en contra realizado por un técnico municipal. La sentencia es muy clara y contundente por tanto creemos que el Ayuntamiento debería desistir definitivamente de recurrir".