La cadena MTV ha anunciado para el próximo 25 de octubre, a las diez de la noche, el estreno de Geordie Shore, el programa de telerrealidad (reality show, en inglés) cuyo rodaje en las calles de Magaluf prohibió el ayuntamiento de Calvià al considerar que carecía de "interés público". En 2011, ya se difundió un programa especial grabado en Magaluf que incidía en el morbo, los desmanes sexuales y los excesos etílicos, originando quejas del sector turístico por la imagen que se transmitía del núcleo.
Pese a la restricción para grabar en espacios públicos, este verano la productora de Geordie Shore pudo rodar en locales de ocio de la zona, al tratarse de sitios privados en los que la Policía no podía impedir que se filmara. Ese material ha servido de base para los capítulos de la nueva entrega del programa (la decimotercera) que estén centrados en Magaluf.
La localidad calvianera no será la única zona turística que se vea durante los ocho capítulos de la temporada. Otras localizaciones empleadas por la productora del programa -Lime Pictures- son Eivissa, Ayia Napa (Chipre), Corfú (Grecia) y Kavos (Grecia), que también son destinos del Mediterráneo frecuentados por jóvenes británicos.
El reality empezó a emitirse en Gran Bretaña en 2011, y enseguida la audiencia respaldó ese formato basado en seguir los amoríos, peleas y salidas nocturnas de ocho jóvenes, originarios de la costa de Newcastle. También existe una versión norteamericana (Jersey Shore) y española (Gandía Shore).
En la primera temporada (2011), se grabó un especial en Magaluf (Locura en Mallorca), en la que los participantes dejaron frases como "Si vas por ahí vomitando qué mejor lugar para hacerlo que Magaluf" o "En Magaluf, puedes 'tirarte' una tía por noche".
El Ayuntamiento elevó entonces una protesta formal ante la productora y el sector turístico puso el grito en el cielo. Ese malestar mayúsculo explica la decisión que adoptó este verano el Ayuntamiento al denegar los permisos a la productora para grabar en espacios públicos del municipio. "Decimos no a este tipo de grabaciones que dañan la imagen del destino. El freno a los excesos no tiene marcha atrás", declaró el pasado junio el alcalde Alfonso Rodríguez Badal (PSOE), consciente del riesgo de que una nueva tormenta mediática enturbie los esfuerzos por reconvertir el destino. En una reunión a principios de verano, el alcalde arrancó el compromiso de parte del sector empresarial para que no permitiesen grabaciones de este programa en su interior. Otros dueños de locales de ocio, sin embargo, llegaron a un acuerdo con la productora.
