La ciudad de Inca está absorviendo una demanda de viviendas en alquiler que provoca un encarecimiento de la existentes. Virgilio Moreno, alcalde de la ciudad, explica que "se trata todo de una consecuencia del elevado número de no sólo chalés, sino ya pisos normales y corrientes, de la zona costera que en lugar de alquilarse en un régimen general se han pasado al denominado alquiler turístico".
El máximo responsable municipal explica que el elevado éxito de esta práctica en los municipios de la costa está provocando un grave problema en los de interior y en particular en Inca. La imposibilidad de encontrar alojamiento a un precio asequible por parte de los trabajadores de hostelería que llegan de la península para hacer la temporada hace que éstos se desplacen hacia el interior de la isla. Esto ha supuesto que alquileres por un piso, de unos 80 metros cuadrados, en Inca, pasen de los 300 ó 350 euros al mes a 600 ó 650 euros.
Pero además, cabe tener en cuenta que debido a la prolongada crisis económica, que ha afectado especialmente al sector inmobiliario, hace mucho tiempo que no se hacen nuevas promociones, al menos que sean significativas. Esto conlleva a incrementar la carestía de vivienda.
Precio elevado
Moreno explica que "esto nos lleva a otro problema. La demanda de pisos para temporeros, que se juntan para compartir piso y pagar el elevado alquiler, hace que el precio suba hasta extremos en que es inasumible para las parejas jóvenes del municipio y nos tememos una diáspora de este segmento poblacional".
Pare evitarlo, el Ayuntamiento se ha adherido a un programa del IBAVI para el tutelaje de viviendas. Mediante este programa, los propietarios que tengan pisos cerrados pueden acogerse y obtener ventajas como la rehabilitación de los mismos, hasta un tope de 15.000 euros; el cobro seguro del alquiler y el retorno de la vivienda en condiciones de habitabilidad. Este programa supone la suscripción de un contrato por nueve años, aunque el propietario puede rescatarlo antes abonando la diferencia a lo invertido en las obras.
Por otra parte, el alcalde anuncia la puesta en marcha de un plan para la rehabilitación del casco antiguo de la ciudad. Moreno dice que "es algo que va a empezar a estudiarse pero que implica la rehabilitación de calles, aceras, zonas ajardinadas, mejorar la iluminación, la disposición del tráfico y, en fin, un plan integral para poner en valor las zonas donde existen muchas casas cerradas que podrían ponerse en el mercado si obtuvieran una revalorización".
