Tras casi diez años sin la ORA, Inca volverá a pintar líneas azules en el centro de la ciudad para limitar el tiempo de estacionamiento.

Todavía no se ha fijado una fecha para comenzar a grafiar la nueva zona azul, pues en estos momentos el proyecto se encuentra en fase de estudio por parte de la Policía Local. No obstante, el Ayuntamiento de Inca está ya decidido a volver a aplicar la zona azul y, de hecho, ha comenzado a efectuar una prueba piloto en el aparcamiento de la calle Bisbe Pere Cima.

Virgilio Moreno, alcalde de Inca, explica que "desde hace años se ha detectado un problema que hace referencia al pequeño comercio del centro de la ciudad. Hay muchos comerciantes que nos reclaman que haya alguna pequeña zona reservada para clientes que vienen de fuera y necesitan hacer alguna gestión o compra de unos minutos". El alcalde agrega que "ante esta petición hemos pensado que instaurar de nuevo la zona azul es la mejor opción".

Sin embargo, esta nueva zona azul no será de pago como la que se aplicó hace diez años. Moreno insiste en que "el interés del consistorio es favorecer el acceso de los clientes al comercio. No nos guía un afán recaudatorio sino ofrecer un apoyo al sector".

Limitación horaria

Por ello, la zona sujeta a ORA tendrá una limitación horaria limitada. Aún no se ha establecido el máximo pues depende del estudio que está desarrollando ahora mismo la Policía Local. De igual forma, se está a la espera de determinar las calles que se verán afectadas.

Moreno indica que "no interesa ampliar la zona azul demasiado porque si no nos saldríamos de la zona comercial". Dicha zona azul se limitaría a un número determinado de calles del centro en las que actualmente se aparca pero que se observa que están saturadas todo el día.

La nueva zona azul deberá ser gratuita porque no hay suficiente espacio como para licitar este servicio, ya que no resultaría rentable para una empresa. Ese era el sistema que se llevó a cabo en su día.

Sin embargo, si se aplica una zona azul gratuita se plantea el problema de que serán necesarios vigilantes para el correcto funcionamiento. Antonia Triguero, concejal de Policía Local, manifiesta que "se ha hablado sobre ese particular y es algo que también se está estudiando pues serán precisos varios agentes más"

Pesará, sin duda, en la decisión final, la prueba que se efectúa estos días en el aparcamiento de la calle Bisbe Pere Cima. Este solar, cedido en precario por un particular durante un año, pero prorrogable, ha sido dotado de un firme de grava compactada y se han delimitado, con balizas, unos 35 aparcamientos sujetos a limitación horaria.

En este caso, se permite sólo aparcar durante una hora como máximo. La prueba comenzó el pasado lunes y, de momento, se ha visto cómo durante todo el día sobra espacio, cuando dicho solar anteriormente siempre estaba abarrotado de vehículos. Aún es pronto para sacar conclusiones de la prueba, pues existe la posibilidad de que no se haya informado suficientemente a los usuarios, pero, de momento, la escasa utilización del aparcamiento indica que el problema de estacionamiento en el centro es la falta de espacio para los trabajadores de la zona y los residentes.