La Fira Pagesa de Manacor demostró un año más el poder de convocatoria que tiene el pequeño y mediano comerciante. Las avenidas des Tren y Fra Juníper Serra acogieron la tradicional feria de septiembre que sirve para cerrar el calendario de verano y casi inaugurar el otoñal.

Aunque ayer fuera el día grande en cuanto a paradas, la Fira Pagesa empezó ya el sábado desde las seis hasta las doce de la noche, donde se concentraron alrededor de las inmediaciones de la estación de trenes, los puntos de venta de artesanías, alimentación y gastronomía. Todo ello ambientado con xeremiers, atracciones diversas y una velada de música jazz en directo.

Ayer sin embargo el abanico de propuestas aumentó con la inclusión incluso de coches, exposiciones solidarias o muestras de baile en línea o ball de bot. Para atraer a un mayor número de visitantes el ayuntamiento de Manacor habilitó el párking subterráneo de la plaza de Sant Jaume para que fuera gratuito durante las dos primeras horas, además del aparcamiento del Complex s'Estació, abierto ayer hasta las once de la noche sin coste.

En total la Fira ha contado con unos 60 artesanos de todas partes de Mallorca, desde la moda a la bisutería pasando, por ejemplo, por la decoración de objetos tradicionales.

Las celebraciones continúan hoy con el Firó al que como cada año se le une el mercado tradicional de los lunes en Manacor, que pasa de la plaza Ramon Llull y sus inmediaciones a las avenidas Mossèn Alcover y des Tren. Desde el Ayuntamiento han querido valorar con la Fira "nuestras raíces y cultura, para así también dar a conocer un poco de nuestro pasado como pueblo". Un atractivo para incentivar las comprar de cara a la temporada invernal.