La única publicación mensual local que queda en Sant Joan cambia de manos y de generación. La revista, nacida en 1980 y vinculada a la Obra Cultural Balear, pasa a ser gestionada por nueve jóvenes que ya le han dado un nuevo aire a la portada y maquetación del número 433, el último salido a la calle. Un nuevo reto para el nuevo periodismo 'santjoaner'.