En la tarde de ayer se inauguró en Son Servera el gran mural del Projecte Som-riu, una iniciativa que nace de la Fundació APROSCOM y el artista serverí Sath. El lateral de la galería de arte Can Dinsky ha servido de lienzo para que la cara de la joven vecina del municipio Xisca Ballester quede reflejada con trazos de pintura de aerosol, que manejan las expertas manos del autor Sandro Thomàs y la ayuda de los alumnos del centro educativo Joan Mesquida de Manacor, con quien ya habían trabajado hace unas semanas, pintando el mural del patio o realizando sendos talleres de pintar camisetas.
La inauguración resultó todo un éxito, los alumnos del centro educativo para personas con discapacidad intelectual no faltaron, como tampoco autoridades y vecinos, que no se quisieron perder el singular acto. Un acto que estuvo acompañado por las danzas acrobáticas que se realizaron en las paredes del edificio vecino y el tradicional piscolabis al que invitó el consistorio serverí.
La iniciativa Som-riu surge paralelamente con un proceso de transformación del centro Joan Mesquida, con su apuesta decidida por la inserción de las personas con discapacidad intelectual, en el se implican la dirección del centro y el artista que en estos momentos se encontraba viviendo en Tailandia, pero ésto no fue motivo para que el pasado mes de febrero pusiera en marcha una campaña de crowdfunding para iniciar el Projecte Som-Riu, una idea que inspira un emoticono y que combina el sonreír con el ser un río. Este primer mural sería el nacimiento de un río del que sus organizadores esperan salgan muchos afluentes. Los afluentes serían los pueblos que quieran participar en el proyecto con un mural. Algunos ayuntamientos como Manacor o Capdpera ya han mostrado su interés en colaborar con esta labor solidaria, que ayer dio sus primeros pasos de forma oficial y festiva, convirtiendo la pared de una casa en un gran lienzo donde la cara de una alumna del centro y vecina del pueblo esboza un gran sonrisa emoticona.
El éxito del Som-Riu ha quedado más que patente, ya sea reflejado en las caras de los alumnos del centro Joan Mesquida que se han hecho el proyecto suyo, como también lo han hecho muchos vecinos del pueblo, o los colaboradores que ha tenido el proyecto, así como las muchas aportaciones recibidas en la campaña de crowdfunding. Un gesto muy aplaudido: tres padrines
La situación del mural, en la bajada de la céntrica calle del Tren, junto a La Unió y al lado de uno de los pocos solares sin edificar del pueblo de la comarca del Llevant, facilitará que muchas personas se paren a contemplar la obra de arte. En este sentido, algunas voces vecinales ya se han alzado para que el consistorio adquiera dicho solar y lo convierta en una zona verde.
