Calvià tuvo sus propios Oscars. Fue entre 1975 y 1978, y alcanzaron una fama notable, sobre todo en la categoría de cortometrajes. El listado de de directores que presentaron películas así lo deja claro: Agustí Villaronga, Emma Cohen, Fernando Colomo e Imanol Uribe, por mencionar algunos. El presidente del jurado llegó a ser Jaime de Armiñán. Las ceremonias se celebraban en el Hotel Maricel y los premios eran cuantiosos para la época: hasta 500.000 pesetas (3.000 euros).

La historia de los Premis Calvià de Cinematografia es uno de los temas que se trata en la exposición Calvià és cinema, inaugurada esta semana en la sede consistorial. Se trata de una iniciativa del Departamento de Cultura del Ayuntamiento, con la colaboración de la Illes Balears Film Comission y del l'Arxiu del So i de la Imatge del Consell de Mallorca. La muestra se podrá visitar de lunes a viernes de 9 a 20 horas, hasta el próximo 12 de agosto.

La exposición reúne carteles, pasquines, fotografías, maquinaria de cines de Calvià y diverso material relacionado con la presencia del séptimo arte en el municipio. Todo ello estructurado en torno a cinco ejes: la presencia de actores de Hollywood; los ya mencionados Premis Calvià de Cinematografia; las filmaciones promocionales; las películas que se grabaron en el término, y la historia de las salas de cine.

Un cine en Magaluf

En referencia a este último punto, se recuerda cómo en Magaluf hubo un cine desde 1969 hasta la década de los ochenta, una circunstancia poco conocida por los calvianers. Estaba en lo que hoy es el Hotel Antillas Barbados, tenía capacidad para 600 plazas y exhibía por ejemplo las películas galardonadas en los premios de Calvià.

Unos títulos entre los que, por cierto, hubo algunos que obtuvieron luego reconocimiento internacional, como El ascensor, que logró el Oso de Oro en la Berlinale.

También hubo una sala en es Capdellà, conocida como el cine de Ca l'Amo en Tomeu, en Sa Societat e incluso en la parroquia de Calvià, en la que el capellán Joan Coli Triay promovió una programación cinematográfica.

En la muestra, ocupa además una papel destacado el glamour de Hollywood. Errol Flynn, por ejemplo, pasó temporadas en Es Molí (Cas Català).

Y, en Portals Vells, se rodó El Mago, una película que acabaría dando nombre a la cala y que contó con un cartel de lujo -Anthonny Quinn, Michael Caine y Candice Bergen-, aunque no obtuvo gran éxito de público.

Otra localización de cine fue es Caló d'en Monjo, donde se filmó Muerte bajo el sol, una película basada en la novela de Agatha Christie.