El Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) generará este año unos ingresos al ayuntamiento de Sóller de 5'5 millones de euros, lo que supondrá medio millón más de recaudación que en el ejercicio económico de 2015.

Así lo recoge la propuesta que la junta local de gobierno aprobó en su sesión ordinaria de esta semana en la que se contemplan unos ingresos totales de 5,03 millones de euros en concepto de IBI en urbana y otros 463.903 euros de contribución de los inmuebles situados en suelo rústico. El aumento respecto el año pasado es del 10%.

El incremento de la recaudación se explica porque Sóller está en proceso de actualización de los valores catastrales, fruto de la revisión que se efectuó en 2010 y que entró en vigor el ejercicio siguiente, reconocieron fuentes municipales. De acuerdo con esta revisión, la base imponible se actualiza al alza a razón de un 10% anual. A efectos prácticos, el cálculo del impuesto se ha hecho a partir de unos valores catastrales que del año 2015 al 2016 se han incrementado en el citado 10%, porcentaje que equivale al incremento de la recaudación. El proceso de actualización terminará el año 2020 de acuerdo con el calendario previsto.

Los ingresos por contribución urbana son una importante fuente de financiación para el Ayuntamiento, ya que este año representan más de un tercio de los ingresos totales que obtendrá el municipio a lo largo del año. Con este impuesto el Ayuntamiento puede hacer el pago de la nómina de todos sus trabajadores.