En la Fira de Maig de Campos del próximo fin de semana faltará la esencia genuina de la celebración: el Concurso de vacas frisonas. En su lugar, tomará protagonismo el pan hecho por las panaderías del pueblo. La suspensión del certamen nacional selecto reproductor bovino frisón, por la crisis del sector lácteo, obliga al consistorio a plantear alternativas, nuevos atractivos. No descarta que pueda haber "una muestra de vacas, entre otras cosas para que los más pequeños sean conscientes de donde venimos, de los orígenes campaners". Esta semana, los ganaderos han expresado su desesperación. El goteo de abandonos no cesa, el relevo generacional es prácticamente nulo (apenas en un par de explotaciones) y las industrias que sobreviven en Mallorca también reconocen serias dificultades. Han de buscar equilibrios para subsistir. Diario de Mallorca ha contactado esta semana con ellas.
La agonía del sector lácteo viene arrastrándose desde hace décadas En el recuerdo, marcas y puntos de recogida de leche como Blahi, Piris, Ilma, Let Crem... En la actualidad, los nombres propios son Agama (fábrica en Palma), Formatges Grimalt (es Llombards, Santanyí), Prilac (Porreres) y Formatges Burguera (Campos).
Los profesionales aseguran que hacen todo lo posible para ayudar a los payeses. Máximo esfuerzo para que no desaparezcan. Entienden y comparten sus argumentos y quejas, como los conocidos excesivos costes por la insularidad y falta de mayor concienciación por parte de ciudadanos, hoteleros e instituciones. En este sentido, se reclama que haya leche y queso made in Mallorca en escoletes, escuelas, institutos, residencias, centros de día, hospitales, prisiones, etc. Se espera que la ecotasa tenga en cuenta al sector y gusta la propuesta de crear una marca de calidad de la leche y el queso de la isla.
Formatges Grimalt (impulsada en 1948) compra la leche de seis ganaderías de Campos, Felanitx y Porreres. El precio medio del litro de leche se sitúa en 36 céntimos, informan el gerente, Lucio Rodríguez, y el presidente, Toni Vidal. La producción anual ronda los 4 millones de litros de leche. Saca a la venta una decena de tipos de quesos. A resaltar el ´espíritu´ de la empresa: el sector productivo, los propios ganaderos, participan en un 50% del capital. El objetivo es vender el producto en Mallorca.
Formatges Burguera, en Campos, elabora tres tipos de quesos. Los dueños de este negocio familiar (se autoabastece con su propio ganado vacuno) son los hermanos Jaume y Sebastià Burguera. Cantidad de litros de leche anual: unos 360.000. Consideran muy necesario que los hoteleros se involucren mucho más, tengan en cuenta los productos de calidad hechos en la isla y sus posteriores beneficios para el paisaje, medio ambiente, turismo y economía.
Damià Duran, apoderado de Productors Illencs S.A., es decir Prilac, explica que cuentan con dos explotaciones, s´Hort de can Mates de Campos y s´Allapassa de Llucmajor. Rafel Barceló, Pometa, de s´Hort de Can Mates, esta semana detalló a este diario que el precio base del litro de leche está ahora fijado en 31 céntimos. En cuanto al volumen de litros, Duran indicó que 1.800.000. La gama de productos que se ponen a la venta: yogur, quefir, quark y quesos. Cabe apuntar que Prilac nació con el primer Pacte de Progrés, legislatura 1999-2003. Se implicaron el Grup Fontanet y la cooperativa Lleters de Mallorca (en esos momentos con cerca de veinte ganaderías y ahora apenas tres). El Govern se desmarcó y ha habido diversos cambios, si bien Fontanet, así como la misma titularidad de Avícola Ballester, están llevando las riendas, según distintas fuentes.
Y en la entrada de la capital, Palma, desde Manacor, se ubica la fábrica Agama, la que maneja mayor número de litros anuales: entre 11 y 12 millones. Casi una veintena de ganaderías aportan la materia prima (el precio base es de 31 céntimos por litro), para la leche, Laccao, mantequilla y nata, principalmente. Se promocionan visitas guiadas a la fábrica. Ganaderos temen que la eliminación de la prima de cantidad a partir de este 1 de mayo agrave aún más su delicada situación.
Se calcula que solo entre un 8 y un 10% del total del consumo de leche y queso en Balears, es producido en la comunidad. La eliminación de las cuotas lecheras es una estocada de lo más dañina. Competir con los bajos precios de productos que vienen de fuera, misión imposible. "De seguir así, estamos abocados al fracaso", advierten los payeses y las industrias.
