"Ante la publicación de determinadas noticias en medios británicos relacionadas con Magaluf, el Ajuntament informa que no tiene conocimiento ni denuncias de las supuestas actuaciones que relatan estos medios, en el municipio", comunicó ayer el consistorio. No obstante, "el Ajuntament trasladará estas informaciones a la Delegación del Gobierno y a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado por si pueden constituir algún tipo de delito. Se pondrá en conocimiento de la Guardia Civil que es quien tiene las competencias para investigar si existen indicios constitutivos de delito contemplados en la ley de Seguridad Ciudadana y en el Código Penal". En esta línea, "el Ajuntament utilizará todos los medios legales que tiene a su disposición y estará vigilante por si detecta cualquier conducta constitutiva de infracción penal o administrativa. Recuerda que las ordenanzas vigentes prohíben ciertas prácticas como mantener relaciones sexuales en espacios públicos". Finalmente, la nota emitida en la tarde de ayer sentencia: "El consistorio quiere dejar claro que no todo vale, y pide la colaboración e implicación de instituciones y sectores relacionados con el turismo para hacer frente a las prácticas que se quieren desterrar del municipio". Vecinos lamentan la mala fama de Magaluf, cuyo sobrenombre Shagaluf ha traspasado fronteras, por las descontroladas fiestas que se viven allí. La llegada de los bobbies británicos, el pasado verano, para vigilar la localidad, también tuvo mucha repercusión mediática .