Desde el pasado lunes los padres de los alumnos del colegio Na Penyal de Cala Millor, en Son Servera, no pueden acceder con vehículos hasta la entrada principal del centro. El acceso tiene que realizarse por la parte trasera del edificio, junto a una zona de aparcamiento público muy cercana, cruzando unos treinta metros de zona de pinar.

Esta medida se toma para evitar el colapso circulatorio que padece un centro con 600 alumnos y 50 profesores. Desde ON Son Servera, su portavoz Antoni Cánovas, considera buena la medida, aunque recrimina que antes de tomarla, se tendría que haber adecentado la zona. Primero adecuando los caminos que transcurren por el pinar con adoquines o marés, para evitar charcos los días de lluvia e impidiendo que los coches puedan circular fuera de la zona habilitada para aparcamiento y evitar que confluyan con los viandantes. En segundo lugar, limpiando un recinto totalmente degradado con mucha basura y falta de papeleras, ya que no hay ninguna en todo el perímetro.

Por otro lado, la alcaldesa socialista, Natalia Troya, ha manifestado a este periódico, que desde hace tiempo se mantienen reuniones con la dirección del colegio para estudiar una solución y que la próxima semana está prevista una reunión con el conseller de Educación para tratar el tema de la ampliación del centro y arreglar los accesos. En cuanto a la adecuación del camino que transcurre por el pinar, la primer edil señala que a principios de curso se hizo con grava una senda para cruzar el pinar y que si no ha sido suficiente se tendrán que tomar más medidas.