"Seguimos con vida". Así se expresó ayer la promotora del controvertido parque solar proyectado en Santa Cirga. In extremis, la comisión política de la Comisión de Medio Ambiente de las Illes Balears aplazó su votación sobre la iniciativa. El hecho de que la empresa Parc Fotovoltaic Santa Cirga SL presente nueva documentación, es decir, un segundo proyecto más reducido y, en consecuencia, con menor impacto medioambiental, ha sido clave para continuar con posibilidades. De hecho, ayer, la Comisión de Medio Ambiente tenía claro su voto negativo al plan inicial que contemplaba hasta 90 hectáreas de ocupación. José Antonio Pérez Rojas y Francisco J. García Jiménez, de KS Management, el socio único de la promotora, anunciaron a Diario de Mallorca que próximamente, este mismo mes de abril, habrá una exposición pública del proyecto en Manacor, tanto para que los vecinos afectados como la ciudadanía en general puedan conocer todos los detalles. También estarán presentes ellos mismos "para responder cualquier duda que plantee la gente y recoger sugerencias".

Paralelamente, siguiendo la tramitación habitual, todo el expediente en cuestión acerca del proyecto rebajado, será de nuevo expuesto en Palma. No en vano, la Comisión de Medio Ambiente debe pronunciarse al respecto.

Cabe recordar que la iniciativa de Parc Solar Fotovoltaic Santa Cirga, a ejecutar cerca de la carretera Manacor-Porto Cristo, preveía inicialmente 90 hectáreas de ocupación. En el nuevo proyecto pasan a ser 60.

Tal y como ya informó este periódico en marzo, la promotora presenta ahora una ambiciosa propuesta "para eliminar el 100% del impacto visual" de los módulos. Alrededor de 10.000 almendros "camuflarán las placas del parque fotovoltaico", además de aportar "belleza y rentabilidad". Supondría "el aumento del 600% en la producción agrícola de la finca, con 130.000 kilos de almendras anuales". A su vez, dentro de las mejoras introducidas, figura contar "con un ganado ovino de 300 cabezas para limpiar de malas hierbas el terreno". Y hay que sumar la doble barrera vegetal a lo largo de todo el perímetro.Por ello, la promotora espera disponer del visto bueno por parte de la dirección general de Energía y Cambio Climático del Govern y la Comisión de Medio Ambiente.

En marzo, el pleno del ayuntamiento de Manacor votó en contra del proyecto de 2013. El PSOE, que era quien llevaba la moción, criticó la magnitud del proyecto de 90 hectáreas y advirtió del valor simbólico de la finca donde se asentaría la instalación (lugar de nacimiento de Mossèn Antoni M. Alcover).

Los vecinos discrepan sobre la iniciativa. Hay quienes avisan de su "impacto brutal" y, en contraste, quienes apuestan firmemente por la promoción de las "energías renovables". Unos ven múltiples "ventajas" y "beneficios" y otros "graves perjuicios" para el municipio y la isla.