Habrá un chiringuito menos en una de las playas más famosas de Mallorca: Cala Agulla. Así lo ha confirmado el ayuntamiento de Capdepera , dirigido por el alcalde Rafel Fernández (PSOE). Si cada verano había tres quioscos de madera desmontables, esta temporada turística serán solo dos. Esto obedece a que Costas ha denegado el permiso a uno de los bares. Consultado ayer por Diario de Mallorca, el alcalde, Rafel Fernández, explicó que Costas mantiene que han de respetarse unas distancias entre los chiringuitos existentes en el protegido arenal, y en consecuencia ha de verse reducido el número, de tres a dos.

Se da el caso que Fernández y el regidor de Urbanismo y Medio Ambiente, Xavier Garcia, mantuvieron reuniones con el jefe de Costas, Gabriel Juan Pastor, y el director general de Puertos y Aeropuertos, Xavier Ramis. Con Gabriel Juan Pastor se abordó la reforma del paseo marítimo y precisamente la nueva concesión de los elementos temporales en las playas del municipio para el periodo comprendido entre 2016-2019.

Del ambicioso concurso para la gestión de las playas, hamacas y sombrillas, cajas fuertes y chiringuitos, salió victoriosa la empresa Playas de Capdepera. Fernández señaló que esta empresa acumula más de quince años asumiendo justamente la explotación del litoral gabellí, y que el valor del nuevo contrato sube a aproximadamente 1,2 millones anuales.

Ante la desautorización de uno de los tres chiringuitos desmontables de Cala Agulla, Fernández prevé que el consistorio se vea obligado a descontar los más de 70.000 euros que tenía que suponer de beneficio este quiosco para las arcas municipales.

Asimismo, Costas adviritió de que podrían también sobrar unas 150 hamacas. No obstante, en último lugar y tras la correspondiente revisión técnica, no se ha exigido esta medida.

Respecto al encuentro con Xavier Ramis y el gerente de Puertos de las Illes Balears, Pedro Puigdengoles, Fernández y Garcia trataron también diferentes asuntos como por ejemplo la concesión administrativa de la cantina del muelle, la modificación puntual de la zona portuaria y el proyecto de reforzar el espigón del muelle, "una demanda de los pescadores ya que presenta grietas producidas por los temporales", según informan los gobernantes locales.