La aprobación definitiva del catálogo de patrimonio de Santa Margalida es la culminación de un largo proceso iniciado en el año 2005 con la aprobación inicial del documento por parte del Ayuntamiento. Sin embargo, este primer texto quedó paralizado casi una década desde el punto de vista administrativo, ya que el Consistorio no fue capaz de incorporar los requisitos mínimos reclamados por el Consell, institución que tiene la última palabra en las cuestiones patrimoniales.

No fue hasta el pasado año 2014 cuando el equipo de gobierno formado por Suma pel Canvi y Convergència se puso manos a la obra para aprobar de forma inicial un nuevo texto. En febrero de 2015 se aprobó provisionalmente y fue remitido al Consell para su visto bueno definitivo.

La entrada en vigor del catálogo patrimonial es fundamental para un municipio como el de Santa Margalida. Según el principal grupo de la oposición, Suma pel Canvi, el texto garantiza el final de la política de "sustitución de elementos patrimoniales por hormigón" que se ha llevado a cabo durante años en la Vila.