Después de varios años de espera debido a diversos factores como la falta de dinero o la burocracia administrativa, el proyecto de ampliación de la depuradora del puerto de Alcúdia empieza a ver la luz al final del túnel. La junta de gobierno local del consistorio alcudienc aprobó la pasada semana los pliegos técnicos y administrativos del proyecto de ampliación de la estación depuradora y de la construcción de una nueva estación impulsora en la zona de Bellevue. Ahora, la institución municipal solo está pendiente del vistobueno de la dirección general de Recursos Hídricos del Govern antes de empezar el proceso de licitación de las obras. La intención del Ayuntamiento es iniciar los trabajos a principios de septiembre de este año, por lo que si se cumplen los plazos de ejecución previstos, que son de catorce meses, la infraestructura estará lista en diciembre de 2017. La obra podrá desarrollarse de un tirón, sin necesidad de parar los trabajos en verano debido a la ubicación alejada de la depuradora con respecto al casco urbano del puerto de Alcúdia.

Larga tramitación

La dimensión presupuestaria de la obra, que asciende a 7,3 millones de euros, obliga a publicar el proyecto en el boletín oficial de la Unión Europea, trámite que, según el Ayuntamiento, retrasará algunos meses la puesta en marcha de las obras. Actualmente, los proyectos están en exposición pública, trámite que se prolongará durante los próximos 45 días.

El dinero será adelantado por el Ayuntamiento en función del acuerdo firmado con el Govern, que devolverá el presupuesto en el plazo de diez años. Fuentes del Consistorio alcudienc explicaron ayer que el ejecutivo "empezará a devolver el dinero a partir de este mismo año a partir de las certificaciones que se le envíen".

El proyecto no ha implicado la elaboración de un estudio de impacto ambiental, aunque sí queda pendiente un informe relativo al emisario submarino que verterá el agua depurada al mar, a la altura de la zona de Alcanada. Esta circunstancia no preocupa al Ayuntamiento porque las aguas que irán a parar al mar "estarán mucho más depuradas" que en la actualidad.

El objetivo de la ampliación, una obra reivindicada desde hace años en el Port, tanto por los vecinos como por los empresarios turísticos, es el de solventar los problemas de la actual depuradora, totalmente insuficiente para tratar los caudales que se generan durante la temporada estival, cuando los hoteles y apartamentos están llenos de turistas. Además, algunas instalaciones de la actual estación se han quedado totalmente obsoletas.

La ampliación permitirá ampliar la capacidad de tratamiento de los 14.000 metros cúbicos diarios actuales hasta los 21.650 metros cúbicos. El proyecto incluye la construcción de una conducción de impulsión de 1.386 metros de longitud y una nueva estación impulsora en Bellevue, con una capacidad de 216 metros cúbicos a la hora que se transportarán hasta la depuradora.

Además de la oferta económica que presenten las empresas interesadas al concurso público, el Ayuntamiento ha redactado un pliego de condiciones en el que las mejoras ofertadas tengan más peso de lo habitual en la deliberación de la mesa de contratación.