A falta de un mes para la inauguración del nuevo Espai 36, donde antiguamente se ubicaba la Sala Rigal, El Pi de Sant Llorenç ha denunciado "el coste excesivo" de las obras de ampliación y reforma del antiguo cine. Como ha explicado el concejal Toni Aguilar, "el proyecto ha supuesto un gasto total de cerca de tres millones de euros entre la compra del solar y las tareas de adecuación. Un dinero que asumirá el Ayuntamiento con recursos propios, ya que no ha conseguido ningún tipo de ayuda institucional".

Según El Pi es una cantidad desmesurada, "sobre todo si tenemos en cuenta que el pasado mes de noviembre el equipo de gobierno llevó al pleno una modificación de crédito de 198.684,22 euros. Lo justificaron por la aparición de circunstancias no previstas, pero lo cierto es que cuando se aprobó esta partida las obras ya estaban casi finalizadas". Para los regionalistas este es un ejemplo más "de la falta de planificación y previsión con la que actúa el gobierno llorencí". Otra de las quejas del El Pi es que la sala haya perdido su esencia tradicional y su antiguo nombre: "es una falta de respeto a la memoria colectiva del municipio".