La presidenta del Govern Francina Armengol, acompañada del conseller de Territorio, Joan Boned, visitaron ayer Son Servera para firmar dos convenios de uso de dos viejas reivindicaciones ciudadanas. El primero afecta al uso del solar de 2.000 metros cuadrados, que el Institut Balear de la Vivenda (IBAVI) posee frente al centro de día de Son Servera y que actualmente se encuentra en un estado de total abandono. El solar se arreglará y reconvertirá en una zona verde para uso de los ciudadanos y sobre todo de los usuarios del centro de día que dispondrán de unos metros para ellos.
El segundo a los edificios de la antigua estación de tren, que tras ser remodelados íntegramente dentro del proyecto del tren de Llevant y abandonados después, quedaron destrozados por actos vandálicos. Actualmente Serveis Ferroviaris de Mallorca ya está trabajando en su recuperación y ayer se firmó la cesión del espacio por un periodo de doce años al consistorio de Natalia Troya.
El segundo convenio es el que Armengol destacó que esta colaboración es una firme apuesta para que los edificios y espacios públicos que en los últimos años están sin utilizar, con el riesgo de su degradación que ello supone, cambien de cara y tengan una utilidad para los vecinos, convirtiéndose en espacios vivos. A la pregunta de que si el convenio supondrá el abandono del proyecto tren de Llevant, el conseller dijo que la prioridad ahora está en electrificar toda la red ferroviaria, en la que el ejecutivo balear destinará 50 millones de euros.
En este sentido Armengol aclaró que las decisiones se han tomado en base al financiamiento autonómico, y que la electrificación se podrá realizar gracias a fondos europeos. El proyecto del tren de Llevant depende de un financiamiento estatal, recordó Armengol. Finalmente la comitiva visitó la gasolinera del puerto de Cala Bona, una instalación de 2005 que no entró en funcionamiento hasta finales de 2015, cuando Armengol se comprometió a ello en septiembre.
