La asociación de madres y padres de alumnos (amipa) del colegio público Duran Estrany de Llubí están en pie de guerra contra la conselleria de Educación por haber decidido de forma unilateral que los escolares llubiners que inicien el ciclo de secundaria a partir del próximo curso se matriculen en el instituto de Muro y no en el de Sineu, que ha sido el centro de referencia de los estudiantes de Llubí hasta la fecha.
Fuentes de la amipa de Llubí explicaron ayer que, después de varias semanas de "rumores" al respecto, el pasado viernes recibieron una notificación oficial de la dirección general de Planificación, Ordenación y Centros del Govern en la que anunciaba su intención de adscribir a los escolares de Llubí al instituto Albuhaira de Muro a partir del próximo curso escolar apelando a "cuestiones de racionalidad y optimización de recursos". Los padres y madres de alumnos de Llubí lamentan que la Conselleria no haya consultado la decisión a la asociación ni a los propios centros educativos implicados en el cambio.
Según la carta de la Conselleria, el cambio se basa en dos argumentos que, según los padres, ni están justificados ni responden a la realidad. Por una parte, asegura el Govern que el instituto de Sineu "está saturado", una afirmación que la amipa considera totalmente falsa y que ayer mismo fuentes del centro sineuer negaron de forma tajante a este diario. "El instituto de Sineu no ve con buenos ojos la pérdida del alumnado llubiner que acoge desde hace más de una década", asegura la asociación.
Por otra parte, el otro argumento utilizado por el ejecutivo es que "Muro está más cerca de Llubí que Sineu", cuando los padres sostienen que ambas localidades se encuentran a unos seis kilómetros del pueblo.
En un comunicado remitido ayer, la amipa de Llubí considera que el cambio "no responde a ninguna planificación seria" y que "no ha tenido en cuenta los vínculos entre Llubí y el resto de municipios del Pla con los que comparte no solo el instituto, sino también otros servicios mancomunados".
"Falta de transparencia"
Además de las "inexactitudes" esgrimidas por la Conselleria para justificar el traslado, la comunidad educativa de Llubí se siente "indignada" por lo que consideran una "falta de transparencia y nula voluntad de consenso" que ha demostrado el Govern, ya que "ni los centros afectados, ni los padres y madres, ni el Ayuntamiento han sido consultados". Además, destacan que la decisión "tampoco cuenta con el informe favorable de Inspección Educativa" y que la medida no satisface a ninguno de los centros escolares implicados en la modificación prevista por la Conselleria.
