Dos semanas después de la Nit Bruixa de Sant Antoni a sa Pobla, el barrio barcelonés de Gràcia encendió este fin de semana sus hogueras para celebrar esta fiesta mallorquina dedicada al santo y al solsticio de invierno. Entre cercaviles, gloses, xeremies, ball de bot y torrades, se culminaron ayer tres días de actos en los que la cultura popular es la gran protagonista, con las hogueras como eje central. Además este año, un espectáculo poético-musical y una exposición dedicada a Ramon Llull para conmemorar el 700 aniversario de su muerte se sumaron a la fiesta.

En total se programaron una veintena de actividades, de entre las cuales destacó la encendida de los foguerons, que tuvo lugar el sábado por la noche en la Plaza de la Virreina. Miembros de la conselleria de Cultura del Govern asistido a algunos de los actos entre viernes y sábado, estableciendo lazos con los centros culturales que acogen las actividades baleares, como son el Centro Artesano Tradicionàrius o el Centro de Cultura Popular Violeta.

Las autoridades del barrio de Gràcia, encabezadas por el regidor de Presidencia y Territorio del Distrito de Gràcia, Eloi Badia, y el presidente del Consejo del Distrito de Gràcia y regidor del ayuntamiento de Barcelona, Gerard Ardanuy, recibieron a las autoridades isleñas, entre las cuales Gabriel Ferragut, alcalde de Sa Pobla. Hay que destacar la presencia de Antoni Torrens, impulsor de las fiestas desde el año 1992, cuando propuso hacer un fogueró en la Plaça del Diamant como los que se hacían desde hacía siglos en Mallorca por Sant Antoni, para que sus hijos, estudiantes en Barcelona, pudieran disfrutar de la verbena mallorquina.