El último pleno del ayuntamiento de Valldemossa, reunido en sesión extraordinaria, aprobó de forma definitiva la ordenanza fiscal de la tasa de recogida, transporte y tratamiento de residuos sólidos. La corporación respaldó la norma, por ocho votos a favor del equipo de gobierno y dos abstenciones del Grupo Municipal Popular. La tasa para las viviendas del núcleo se fija en 165,2 euros para el año que viene, sumando los conceptos de transporte y tramtamiento. La misma cantidad tendrán que abonar las viviendas situadas en Son Maixella y en el Port de Valldemossa.

Suelo rústico

Para las casas en suelo rústico, el importe asciende a 191,2 euros. Las viviendas de las urbanizaciones George Sand y Shangrila pagarán en 2016 un total de 194,9 euros por la tasa de basuras. El importe para las viviendas diseminadas de sa Cova será de 120,6 euros.

En el caso de los negocios, la tasa para los hoteles de más de 40 plazas será de 9.039 euros, mientras que los restaurantes de menos de 100 metros cuadrados abonarán 821 euros. Las viviendas turísticas vacacionales deberán abonar entre 195,8 y 395,6 euros, en función del número de plazas.

Bonificaciones fiscales

La ordenanza fiscal contempla una serie de bonificaciones para aquellos que se adhieran al programa de Inspección Técnica de Residuos (ITR).

Según consta en la normativa aprobada, las personas interesadas en formar parte del ITR deberán estar al corriente de pago de la tasa por recogida, transporte y tratamiento de residuos sólidos, al tiempo que tendrán que solicitarlo antes del 31 de enero del año de aplicación.

Para acceder a este programa, tendrán que aceptar que personal autorizado por el Ayuntamiento pueda entrar en sus casas o negocios para controlar que, efectivamente, separan las fracciones de residuos (papel, vidrio, envases y rebuig).

Asimismo, deben consentir que se controlen los residuos que depositen en el Parc Verd, además de tener que adjuntar una copia del recibo del año anterior.

Durante el pleno extraordinario se abordó el escrito de alegaciones presentado por el Grupo Municipal Popular. La corporación lo estimó parcialmente. A la hora de aprobar la ordenanza fiscal, el Partido Popular se abstuvo.