El pleno extraordinario celebrado ayer en Pollença aprobó una modificación de crédito para habilitar una partida de 500.000 euros que se invertirá en la expropiación, pactada con los propietarios, de la finca de Can Febus, ubicada entre la antigua fábrica de tapices de can Morató y el torrente de Sant Jordi, en la entrada de Pollença desde el Moll. El punto fue aprobado con los votos a favor del equipo de gobierno y la abstención de El Pi, Tots per Pollença y Alternativa.

El objetivo del Ayuntamiento es el de realizar en el nuevo solar municipal un proyecto de mejora de los accesos a la localidad, actuación que cuenta con una subvención del Consell de Mallorca que asciende a unos 60.000 euros.

El solar de Can Febus estaba marcado como zona verde en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de 1990, por lo que el Ayuntamiento estaba obligado a expropiarlo. A diferencia del caso de Can Bach, en el que el Consistorio tendrá que pagar el justiprecio marcado por un tribunal externo, la expropiación de Can Febus se ha negociado con la propiedad, que ha aceptado el pago de casi medio millón de euros tal y como había valorado la institución municipal. Hasta la fecha, según afirmó el exalcalde Tomeu Cifre, los propietarios reclamaban un millón de euros.

El proyecto que se ejecutará en la nueva zona verde municipal contempla el asfaltado de la carretera de entrada a Pollença, la instalación de nueva iluminación y nuevas conducciones de servicios, entre otras actuaciones que tienen el objetivo de embellecer este punto de entrada a la localidad 'pollencina' que, además, supone el punto de partida de la conexión con la Ruta de la Pedra en Sec que se dirige hasta Lluc.

El proyecto debe adjudicarse dentro del mes de diciembre porque si no existe el riesgo de perder la subvención ya concedida por el Consell. Por este motivo se convocó un pleno extraordinario y los partidos tuvieron que ratificar la urgencia de la sesión. Los partidos de la oposición decidieron abstenerse al considerar, principalmente el Pi y Tots per Pollença, que el equipo de gobierno de Junts Avançam y UMP no ha contatacto con ellos para consensuar la operación.