La bajada de Puig de Ros vuelve a abrirse hoy al tránsito. El alcalde del ayuntamiento de Llucmajor, Jaume Tomàs (Més), ha firmado la pertinente autorización en base a los informes técnicos municipales y de la propiedad privada que certifican que se han llevado a cabo trabajos de consolidación y que ya no hay riesgos.
A comienzos de octubre tuvo que procederse a la clausura de este conocido vial del núcleo costero de Puig de Ros, llamado popularmente como la bajada de don Mateo (por su antigua relación con el hotel Delta).
Actualmente el camino en cuestión conduce hasta el restaurante Mhares Sea Club. La implicación de la titularidad privada ha resultado clave para el acondicionamiento de la zona. Resalta la instalación de una malla metálica en una curva (similar a las instaladas en determinados sitios de la Serra de Tramuntana). Cabe apuntar que durante unos quince días el consistorio sí que permitió el acceso puesto que consideró que las obras iniciales de adecuación eran suficientes. De esta manera el restaurante pudo celebrar unos eventos finales de temporada. No obstante, la bajada tuvo que ser nuevamente cerrada por motivos de prevención.
Finalmente, el alcalde esta semana ha firmado el correspondiente decreto de reapertura y se espera que hoy se vuelva a transitar con normalidad en el área.
Barreras y cartel que advierte del peligro por desprendimientos. T.O.
La Policía Local ha ido vigilando pero no se pudo evitar que fueran varios los vehículos que retiraran por su cuenta las barreras y llegaran peligrosamente hasta abajo, al igual que ciudadanos a pie. La imagen singular ha sido la del aparcamiento vacío, cuando en temporada alta la masificación de coches es una tónica habitual.
No en vano, se trata de un lugar emblemático del litoral del municipio de Llucmajor. La postal de los acantilados impresiona a los visitantes.
