El edificio de la cantina del campo de fútbol del Sallista está ya empezando a ser derribado tras el informe del aparejador municipal en el que se certificaba el estado de ruina. Habían aparecido unas grietas que se solventaron apuntalando la estructura, pero en solo 24 horas se notó un movimiento excesivo de dichas grietas, por lo que el técnico recomendó derruirlo. El campo del Sallista forma parte del complejo del Nou Camp. En esta zona practican deporte los equipos de base del Constància, unos 400 niños. La asociación de padres ha instalado de forma provisional un módulo prefabricado que se utilizará como cantina. El concejal de Deportes, Gori Ferrà sostiene que "se tiene que proceder al derribo puesto que la entidad no ha podido hacerlo y el Ayuntamiento tiene la responsabilidad de evitar el peligro".