El todavía alcalde de Manacor, Miquel Oliver (Més-Esquerra), cree que la auditorías internas para comprobar el estado de las cuentas, servicios y concesiones del Ayuntamiento han podido ser determinantes para que El Pi y AIPC (socios de gobierno en la pasada legislatura) y el PP de Pedro Rosselló se pongan de acuerdo para presentar la moción de censura contra el pacto de izquierdas. Aunque alguno de esos estudios ya han concluido, otros, los más trascendentes todavía están en proceso. "Sospecho que quieren impedir que todos los indicios que tenemos se confirmen y salgan a la luz", señala Oliver.

El alcalde, que ayer todavía no tenía constancia de los movimientos de la oposición para desbancarle, dice estar "tranquilo y centrado en el trabajo de cada día. Sigo firmando decretos y contratos y los concejales siguen gestionando sus áreas. Nos debemos a los ciudadanos, así que continuamos como hasta ahora".

Si después de la reunión de las juntas locales de los partidos que conforman la oposición, se decidiera registrar hoy la moción de censura, los plazos más lógicos implican que debería materializarse el próximo miécoles 4 de noviembre, en un pleno extraordinario. Curiosamente el mismo día que el equipo de gobierno (Més-Esquerra, PSOE y Volem) tiene previsto realizar una asamblea ciudadana abierta en el teatro municipal.