La Conselleria de Educación comunicó ayer al alcalde de Inca, Virgilio Moreno, la decisión de construir un nuevo centro de enseñanza en la ciudad. Moreno se reunió con el conseller, Martí March, para explicarle algunas de las deficiencias educativas con que cuenta Inca y acordar un calendario de actuación.

Inca padece déficit de plazas escolares en secundaria y en primaria. Por ello, en realidad necesitaría la construcción de una nueva escuela de primaria y de un nuevo instituto. Efectuar estas dos inversiones supondría un considerable gasto. Por ello la Conselleria y el Ayuntamiento han acordado una solución intermedia.

Centro integral

El Govern acometería la construcción de un centro integral. Eso significa levantar un colegio en el que se impartiría educación primaria y secundaria. Virgilio Moreno explica que "sería un poco la idea de retornar al concepto de la EGB; no en el sistema educativo, pero si en la organización del espacio físico. El nuevo colegio contemplaría la educación primaria y la secundaria en lugar de que los alumnos tuvieran que ir a uno de los institutos para cursar este segundo ciclo".

De esta forma, el alcalde entiende que se liberaría también espacio en los dos institutos actuales por lo que "en el caso del Pau Casesnoves podría potenciarse la enseñanza profesional y en el caso del Berenguer d'Anoia potenciarse más los estudios de bachillerato".

La semana próxima Martí March se desplazará a Inca para crear el comité de escolarización de la ciudad, en el que se integrarán los directores de todos los centros actuales. Ese comité evaluará aspectos de futuro.

Nueva reunión

March ha quedado con Moreno en que se organizará una reunión para dentro de dos meses para continuar profundizando en el nuevo centro. El Ayuntamiento, entre tanto, debe agilizar los trámites para poner un solar a disposición de la Conselleria.

El planeamiento urbanístico de la ciudad ya prevé una parcela docente para afrontar las necesidades educativas. Los redactores del PGOU situaron el nuevo colegio en una finca ubicada en el margen derecho de la carretera de Llubí, muy próxima a la residencia de sa Creu y del Hospital Comarcal.

Moreno asegura que se trata de un lugar con buenas comunicaciones con la ciudad pues existe ya un paseo peatonal que facilita el acceso.