Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Sa Fira

Un buen principio de reorientación

El domingo pasado se celebró la feria de Alaró, antes Gremial, y ahora artesana. Guillem Balboa, el teniente de alcalde y concejal de Ferias, se lo trabajó bien y dentro...

Un buen principio de reorientación

El domingo pasado se celebró la feria de Alaró, antes Gremial, y ahora artesana. Guillem Balboa, el teniente de alcalde y concejal de Ferias, se lo trabajó bien y dentro de la premura de este año salió bien parado del envite. Su idea para modernizarla es volver a los orígenes. Y siempre está bien modernizar los conceptos, aunque para ello sea preciso volver a las fuentes. Por ejemplo, un acierto importante fue la eliminación de la muestra de cocina. El día de la feria es un día poco indicado para ello porque los bares y restaurantes tienen suficiente trabajo en casa como para salir fuera. Lo que se conseguía con esa muestra era un agobio de tres horas a mediodía y luego un lugar lleno de basura y desangelado toda la tarde. Una muestra de cocina es un buen evento para celebrarlo en solitario cualquier fin de semana del año, y lo cierto es que la feria del domingo no acusó para nada su falta.

Producto de primera de los payeses elaborado con amor

La colaboración entre payeses de Pollença y maestros de la cocina como Christian, del restaurante los Zarzales, situado en el Moll, está dando unos resultados que hacen creer mucho en las posibilidades de una auténtica industria del campo. La calidad del cordero de Pollença es ya indiscutible y contrastada pero la habilidad de Christian le ha dado un vuelco, un valor añadido. Ha creado una receta donde el cordero se cuece durante doce horas a fuego muy lento, dando un resultado realmente espectacular. Una carne, entremedias de un asado y un guiso, que se deshace en la boca.

Compartir el artículo

stats