El ayuntamiento de Marratxí aprobó en el último pleno las cuentas del pasado año 2014, que se cerraron con un remanente de tesorería de 8,4 millones de euros.

Antes de iniciarse las votaciones, el portavoz del PP, Xisco Ferrà, solicitó que este dinero debería destinarse como primera opción a rebajar la deuda bancaria, por lo que la misma quedaría por debajo de los cuatro millones de euros.

En este sentido, el alcalde Joan Francesc Canyelles (Més) dijo que este remanente, por Ley, no se podía destinar a lo que quisiera el Ayuntamiento y que tampoco se podían introducir en el presupuesto del próximo año 2016. El alcalde de Marratxí añadió que el equipo de gobierno considera que, debido al bajo interés que se paga actualmente a los bancos, sería más interesante decidir en qué se invertiría este dinero del remanente del pasado año.

En el turno de réplica, el popular Xisco Ferrà dijo que él había lanzado una sugerencia, y admitió que el grupo municipal del PP tampoco destinaría este dinero a la deuda bancaria por el mismo motivo, ya que salía más a cuenta pagar los intereses bajos que no cancelar parte de la deuda.

El punto fue aprobado por unanimidad de todos los partidos que componen la corporación municipal.