Varias decenas de alumnos del colegio público Blai Bonet de Santanyí tuvieron que ser desalojados ayer de las tres aulas prefabricadas situadas en uno de los patios, como consecuencia de las filtraciones de agua provocadas por las lluvias que durante toda la noche y la mañana de ayer descargaron sobre el pueblo. Los escolares tuvieron que ser redirigidos hasta el comedor para poder proseguir, en la medida de lo posible, el ritmo normal de las clases. Muchas madres y padres de los niños afectados protestaron por la situación y ante la falta de soluciones para reformar de una vez por todas una escuela con casi cien años de antiguedad.
El jefe de estudios del Ceip Blai Bonet, se mostraba ayer molesto ante y quitaba importancia a la trascendencia de lo sucedido: "Hace años que venimos reclamando una escuela nueva, pero resulta que ahora somos noticia por un hecho que mañana se solucionará poniendo silicona", decía, al tiempo que enfatizaba con temor "que nadie de la junta directiva ha avisado a los medios". "No ha sido un desalojo, simplemente les hemos cambiado de sitio por precaución cuando hemos visto los problemas".
Pero lo cierto es que las lluvias de ayer también afectaron, además de a las aulas prefabricadas, a otras del histórico edificio principal, que hace dos años ya tuvieron que ser rehabilitadas, lo que da cuenta de la precaried o de la construcción de un nuevo edificio.
Y es que el temporal que azotó el sur de Mallorca a finales de 2013 se cebó especialmente en el Ceip Blai Bonet. El 29 de octubre hasta siete aulas del centro se quedaron sin techo y prácticamente todas sufrieron uno u otro daño material como inundaciones o rotura de cristales.
