El alcalde de Alcúdia, Antoni Mir, estuvo presente en una reunión de la FEMP (Federación española municipios y provincias) donde formó parte activa del desacuerdo con la ley de control del gasto impuesta por el gobierno central a los municipios españoles. Según explicó Mir, el alcalde de Leganés protagonizó una ponencia proponiendo una enmienda en la que "se insta al gobierno central a anular la ley, o bien atenuarla". En concreto, la lista que firmó a favor de la enmienda estaba compuesta por partidos como PSOE, PNV, Convergència, Coalición Canaria o El Pi.

El equipo de gobierno de Alcúdia aseguró ayer en una rueda de prensa haber firmado a favor de la enmienda porque "se trata de una ley totalmente injusta, que deja a municipios como Alcúdia sin la posibilidad de invertir fondos públicos en proyectos que beneficien a la localidad. Por esa razón, siempre nos hemos declarado en su contra", insistió,