Como viene ocurriendo durante los últimos años, el equipo de gobierno ha acudido a la partida para arreglar el vertedero "para dedicarla a todo tipo de actuaciones no previstas inicialmente", ha criticado Més per Capdepera. "Partiendo de la base de que siempre hemos sido contrarios a esta forma de actuar, valoramos qué actuaciones eran necesarias y urgentes", añade el portavoz de la formación en la oposición, Pere Fuster.
El grupo decidió abstenerse en el último pleno para permitir las transferencias de crédito que se deben dedicar a la construcción de una nueva oficina turística en la Plaza dels Pins y para la señalización y difusión de las rutas senderistas.
"En cambio nos oponemos a dos partidas para actuaciones en sa Font de sa Cala y Canyamel, no porque estemos en contra, sino porque no han sido consensuadas con nadie. Cuando el equipo de gobierno se siente con Més para consensuar en qué calles y zonas se debe actuar no pondremos ningún problema para aprobar esta partida". "Tanto sa Font de sa Cala como Canyamel son barrios que han sido abandonados durante años y necesitan inversiones, pero estas las tenemos que decidir entre todos", dice Fuster.
